Fuente: Diario El Mundo – 16/09/2014

No es la grasa, estúpido’, podría decirse manipulando la célebre frase de la campaña electoral de Bill Clinton en 1992. Porque en los estudios de nutrición cada vez está más claro que no importa tanto la grasa en sí, como su origen, a la hora de determinar sus efectos para la salud. La última evidencia en esta línea señala que el consumo de lácteos, ricos en grasas de origen animal, puede tener efectos protectores contra la diabetes tipo 2.

No es la primera vez que un estudio, por ejemplo, señala los beneficios del yogur contra esta patología, pero en esta ocasión, las ventajas son extrapolables a otro tipo de lácteos.

Los resultados proceden de una amplia investigación sueca que se ha dado a conocer en el transcurso de la reunión anual de la Sociedad Europea para el Estudio de la Diabetes que se está celebrando en Viena (Austria). Con los datos de casi 27.000 individuos de 45 a 74 años, seguidos durante 14 años, el equipo de Ulrika Ericson

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