Gelatina de leche con higos
por Miriam García
Esta gelatina de leche con higos es un postre de inspiración turca que recuerda un poco a la panna cotta italiana: se convierte la leche líquida en un sólido empleando gelatina, se aromatiza con agua de rosas o de azahar, se endulza y listo, ya tenemos una golosina perfecta para consumir con unos higos u otra fruta fresca a nuestro gusto.
Este postrecillo, precisamente porque se prepara con leche fresca casi sin ningún tipo de transformación, dura muy poco y además hay que envolverlo bien para que no se reseque. Pero no os durará mucho, descuidad… Vamos con él.
Ingredientes
- 500 ml de leche entera Priégola
- 15 g de gelatina neutra en polvo (5-6 hojas)
- 50 g de azúcar glas
- 1 cda. de agua de rosas o de azahar
- Fruta fresca
- Un chorrito de miel (facultativo)
Elaboración
- Forramos con plástico una fuente rectangular de unos 18×25 cm.
- Hidratamos la gelatina en agua fría unos minutos, según indiquen las instrucciones.
- Mientras tanto, ponemos la leche en un cazo y calentamos, pero sin que llegue a hervir. Añadimos la gelatina hidratada y removemos para que se disuelva.
- Agregamos el azúcar y el aroma. Vertemos en la fuente preparada y dejamos enfriar; cuando esté a temperatura ambiente metemos la fuente en la nevera, mejor tapada con plástico para que no coja olores. Dejamos que se asiente bien, mejor toda una noche.
- Cuando vayamos a servir, volcamos la preparación en una tabla o bandeja, levantamos el plástico, y cortamos rombos con cuidado, porque la gelatina queda bastante delicada.
- Servimos con higos frescos u otra fruta; podemos regar con algo de miel si nos gusta.
Y ya tenemos un postre fresco, sencillo, original y relativamente ligero con ingredientes sin complicaciones.