Panna Cotta de Chocolate

por Miriam García

La panna cotta es un postrecillo italiano que consiste nada más y nada menos que en nata cuajada con gelatina. Parece que en origen la nata se cuajaba con calor utilizando claras de huevo, pero acabó evolucionando a una versión muy cómoda que es esta de usar gelatina, sin más.Panna cotta significa literalmente eso, nata cocida, y usando una nata de calidad como Priégola el resultado es magnífico, por esa razón y por su sencillez es un dulce que se ha hecho tan popular. Imaginaos si además combinamos la nata con chocolate… para chuparse los dedos sin dejar ni uno.

Ingredientes

  • 200 ml de nata líquida Priégola
  • 170 g de chocolate negro de cobertura
  • 45 g de azúcar blanquilla
  • 2 ½ de gelatina en polvo sin sabor

Elaboración

  1. Ponemos el chocolate en un bol apto para microondas y lo derretimos, en intervalos cortos y removiendo bien para evitar que se recaliente el chocolate.
  2. Ponemos la nata en un cazo y la calentamos junto con el azúcar, hasta que se disuelva.
  3. Mientras tanto hidratamos la gelatina en polvo en un cuenco, con 3-4 cucharadas de agua fría.
  4. Cuando la gelatina esté hidratada la añadimos a la nata y la llevamos a ebullición. En cuanto hierva apagamos el fuego y removemos para que se disuelva la gelatina.
  5. Agregamos el chocolate derretido y mezclamos bien, hasta que la mezcla esté homogénea.
  6. Vertemos la mezcla en 5-6 flaneras pequeñas y la dejamos enfriar a temperatura ambiente. Después metemos los moldes en la nevera para que la panna cotta acabe de ponerse firme.
  7. Desmoldamos en platitos y servimos. Podemos tomar los flancitos solos, con algo de nata montada o con alguna confitura de frutos rojos, ¿a que es buena idea?

Un truco: si queréis que os quede ese acabado brillantito que se ve en las fotos tenemos que untar los moldes antes de verter la mezcla de la panna cotta con glucosa líquida. Es un ingrediente que se encuentra en las buenas tiendas online de material de pastelería. Además facilita el desmoldado.