Mi Tarta de Cumpleaños
Fuente: {Blog: Cocinar y Compartir. Fotos. Cocinar y Compartir}
Queremos compartir con vosotros una publicación interesante en el Blog "Cocinar y Compartir" en el que utilizan nata fresca de Priégola para la elaboración de una tarta y su autora, explica muy bien las diferencias entre utilizar una nata UHT y una nata fresca en repostería.
Cuando era pequeña y los años que cumplía tenían un solo dígito o si tenían dos el primero era un uno, las primeras fresas o fresones de la temporada las comía en mi tarta de cumpleaños. Un día que era aún más especial por este detalle. Ahora es increíble que haya fresones desde casi finales de Enero, aunque no voy a opinar sobre la calidad de los mismos.
Como el pasado día tres cumplí 50 años me hacia ilusión comer aquella tarta de fresas que tanto me gustaba y en esta ocasión preparada por mí.
Antes de explicaros como la he hecho, que es muy fácil, quería hablaros un poco sobre la nata para montar que he utilizado en esta ocasión.
La nata, igual que la leche, antes de llegar al consumo se somete a un proceso térmico de pasteurización para reducir agentes patógenos. Dependiendo de la temperatura y el tiempo que dura dicho proceso (Wikipedia dixit) se obtiene nata que se denomina fresca pasteurizada, proceso HTST, si es sometida a 72º durante unos 15 segundos, o se obtiene la que se denomina UHT que es la sometida a 138º durante al menos dos segundos y es la que más se comercializa para el consumo de los no profesionales.
Yo siempre había comprado para montar natas UHT de las marcas Asturiana o Pascual, con un porcentaje de materia grasa del 35.1% que además de ofrecer una fecha de caducidad más larga debido precisamente al proceso UHT, también llevan una serie de aditivos para estabilizarla.
Pero tenía mucho interés en probar la nata fresca pasteurizada de la marca Priégola. Había leído su recomendación a Abraham Garcia, el chef de Viridiana, y es una nata que se produce en Madrid, en una granja que se encuentra en el pueblo madrileño de Villanueva del Pardillo. No es fácil de encontrar, debido a que es fresca, su fecha de caducidad es muy corta y la mayoría de las grandes superficies no la trabajan. Se puede comprar yendo a la granja, sirven a domicilio para la zona norte de Madrid, en su tienda online haciendo un pedido mínimo de 60 €, eso sí tienen muchos otros productos además de lácteos, o en el supermercado del Corte Inglés de Castellana. Lo que me resultó más sencillo fue comprobar por teléfono que había stock y me acerqué al Corte Inglés a comprar un litro, cuatro envases de 250 ml.
Como la iba a montar el sábado por la noche para comer al día siguiente y también quería hacer un poco de decoración con la manga me dio miedo que no aguantara bien estable y mejor que añadir estabilizantes usé un poco de gelatina neutra que no le da olor ni sabor. Sinceramente creo que a esta maravillosa nata ni siquiera le hubiera hecho falta la gelatina, montó más rápido que las UHT y su sabor es un auténtico placer. No creo que vuelva a usar natas UHT, si tenéis acceso a nata fresca comprobareis que la diferencia es notable.
Ya no me enrollo más y os explico cómo hice la tarta, que la verdad es que fue todo un éxito en casa. Al final os pongo también una foto del aspecto de la nata 45 horas después de haberla montado, es la que me sobró, que la comimos el lunes por la noche con unas fresas que también habían sobrado.
Ingredientes
Bizcocho
* 6 Huevos
* 150 gr Harina de reposteria
* 150 gr Azúcar
* Una pizca de sal
Almíbar
* 200 gr agua
* 200 gr azúcar
* Aroma de fresa (opcional, la próxima vez no creo que lo use, no me ha gustado el tono rosado que le ha dado al bizcocho)
Tarta
* 800 gr fresones (sobrarán)
* Un litro de nata para montar (sobrará)
* 2 Hojas de gelatina (3,32 gr)
* 100 gr azúcar glas casera o azúcar blanquilla normal si no podéis moler el azúcar normal, para la nata
* Azúcar glas casera para macerar las fresas
Elaboración
Bizcocho.
Precalentamos el horno a 180º, calor arriba y abajo (convencional sin aire).
En un bol batiremos los huevos con el azúcar. Yo lo hice en la Kitchen Aid pero se puede hacer con una batidora de varillas eléctricas. Batiremos hasta que blanqueen y aumenten bastante de volumen. En ese momento añadiremos la harina tamizada y la pizca de sal y mezclaremos con movimientos envolventes.
Usaremos un molde redondo desmontable (yo he utilizado uno de 21 cm) , ponemos papel de horno en el fondo y después untamos con mantequilla paredes y fondo y espolvoreamos de harina tirando los restos que no se hayan adherido al molde. A esto se le llama encamisar un molde.
Vertemos la mezcla y metemos en el horno durante treinta minutos aproximadamente. A los 25 minutos, si vemos que se está dorando mucho lo podemos cubrir con papel de aluminio. Comprobaremos que está en su punto cuando al introducir un pincho o brocheta éste salga limpio.
Sacamos del horno y dejamos enfriar en una rejilla. Una vez frio lo desmoldamos y reservamos. Yo lo congelé porque lo hice el miércoles y lo iba a montar el sábado por la noche. El sábado por la mañana lo saqué del congelador a la encimera y por la noche estaba perfecto para montar la tarta.
Almíbar.
Mezclamos en un cazo el agua y el azúcar, removemos un poco con una cuchara y lo llevamos al fuego. Desde que empiece a cocer lo dejamos durante unos tres minutos y ya no removemos nada mientras cuece. Añadimos, si queremos, el aroma de fresa o algún licor y dejamos enfriar completamente.
Nata.
Tendremos como mínimo una hora antes tanto el bol como las varillas en el congelador para que estén lo más frias posible. Ponemos las hojas de gelatina en agua muy fría a hidratarse.
Echamos la nata en el bol y comenzamos a montar, cuando esté a medio montar añadimos los 100 gr de azúcar. Cuando esté prácticamente ya montada paramos un momento. Ponemos agua en un cazo y la llevamos a ebullición. Escurrimos la gelatina en una jarrita pequeña y le añadimos dos cucharadas soperas del agua hirviendo.
Removemos y volviendo a batir enérgicamente la nata le vamos añadiendo la gelatina en hilo. La dejamos reposar media hora en el frigorífico.
Tarta
Un rato antes de empezar con los preparativos para montar la tarta lavaremos y secaremos muy bien los fresones.
Elegiremos los más iguales para la parte superior , los partiremos por la mitad y los pondremos en un bol con un poco de azúcar glas.
Otros cuantos los haremos trocitos pequeños y también los pondremos en otro bol con azúcar glas.
Pondremos la parte de arriba del bizcocho, que estará un poco abombada, para abajo y partiremos el mismo por la mitad.
El almíbar ya frio lo pondremos en un biberón y mojaremos las dos mitades. Yo utilicé como las dos terceras partes del almíbar pero es que a nosotros no nos gusta demasiado mojado el bizcocho y además con la nata y las fresas estaba muy jugoso.
Una vez que hemos puesto el almíbar en la parte de abajo, cubrimos con nata montada y encima de la nata ponemos los trocitos de las fresas. Cuidado de que no caiga mucho del líquido que habrán soltado, hacerlo sin volcar, trocito a trocito, hasta que hayáis cubierto bien el bizcocho, ponemos otro poquito de nata encima de los trocitos de fresas.
Tapamos con la parte superior. Cubrimos bien con nata. Decoramos. Y por último colocamos los fresones que teníamos partidos por la mitad y terminamos de decorar por encima.
Para decorar yo he utilizado una boquilla metálica de la marca Cuydesa, la S6, que es una estrella abierta, creo que coincide con la 22 de Wilton.
Aquí os dejo un par de enlaces que os van a ayudar un montón para aprender a decorar una tarta con nata.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=8lLVZXN5j5Q
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=EnhVDo8PB0M
También os pongo, como os había dicho, la foto de la nata fresca montada con la gelatina, 45 horas después. No soltó ni gota de suero. Guardé un poco para observarla. A las 55 horas ya había un poco de suero y ya la tiré.
Enlace directo a la publicación original
Tarta de Mousse de Mandarina Semifría
INGREDIENTES
▪ 150 g de galletas maría
▪ 600 ml de nata fresca Priégola
▪ 1 tarrina de queso crema (300 g)
▪ 2 yogures naturales o griegos
▪ 1 paquete de gelatina de naranja
▪ 1 sobre de cobertura transparente para tartas
▪ 200 ml de leche
▪ 250 ml de agua
▪ 1 tarro de mermelada de mandarina
PREPARACIÓN
1. LA BASE
Disponer un molde desmontable y poner una capa de galletas maría que servirá de base. Es habitual hacerlo con galletas trituradas amasadas con mantequilla pero en mi opinión añade calorías innecesarias y queda más pesada. Yo simplemente coloco las galletas una al lado de otra y si quedan huecos entre ellas (por la forma) trituro unas cuantas y los relleno. Queda ligera y sabrosa.
Opción para cuando no tenemos galletas: Triturar un puñado de cereales (Cornflakes) en la picadora
- 100 gr de mantequilla derretida
- 2 cucharadas de azúcar
- 100 ml de leche
Mezclar hasta formar una pasta homogénea con la que cubriremos el fondo del molde elegido.
2. LA MOUSSE
Hacer la gelatina según las instrucciones del envase usando los 200 ml de leche. Dejar que se vaya enfriando mientras seguimos con el resto de tareas. Es importante que este lo más fría posible (no cuajada, obviamente) para que al mezclarlo con la nata fresca montada, esta no se baje.
Montar la nata fresca y añadir el queso crema y los yogures mezclándolo bien.
Añadir ahora la gelatina y mezclar con varillas suavemente a baja velocidad, hasta tener una mezcla homogénea.
Verter la mezcla sobre la base de galleta y ponerlo en el frigorífico hasta que cuaje.
3. LA COBERTURA
Verter el contenido del sobre de cobertura en un cazo y añadir dos cucharadas de azúcar.
Añadir 250 ml de agua y llevar a ebullición sin dejar de remover.
Añadir 3-4 cucharadas de mermelada de mandarina, mezclar bien y apartar del fuego.
Dejar enfriar hasta temperatura ambiente porque si está caliente derretirá la mousse. Recordemos que teníamos la mezcla anterior en el frigorífico tomando consistencia al menos durante 2 horas. Si tenemos prisa ponerlo un rato en el congelador.
En el momento en que la mousse este cuajando y la mezcla de cobertura y mermelada haya atemperado la podemos verter sobre la tarta para terminar la receta.
Desmoldar y si se desea adornar con menta fresca. Este tipo de tartas están mejor al día siguiente.
Helado de Miel "Sin Azúcar"
Os hacemos llegar una receta que nos ha gustado mucho. Pertenece al blog "El invitado de Invierno" creado por la profesora de cocina y fotógrafa Miriam García.
Reproducimos exactamente su publicación, tal y como su autora la publicó. Es una receta sencilla y ella misma utiliza leche y nata Priégola para elaborarlo. Esperamos que os guste.
Helado de miel sin azúcar | el invitado de invierno
Este año me ha dado por probar recetas de helados, aunque tampoco es que sea especialmente aficionada. Además, en mi casa todo lo que se salga del helado-de-vainilla-de-toda-la-vida como que no… Pero, con lo que a mí me gusta enredar, ¿y lo que estoy aprendiendo? Todo sea por la cultura y la sabiduría culinarias. Y estooooo… que no sé por qué, me estoy enganchando a la miel, ingrediente que nunca me había atraído demasiado. Será la edad, qué sé yo. O la crisis. O la crisis de la edad. Ahora la miel me gusta en casi todo, hasta en las tartas saladas. Pues bien, este helado de miel sin nada de azúcar corriente inspirado en la receta de Sophistimom me ha parecido impresionantemente bueno, con un sabor a miel que no avasalla, cremosísimo y finísimo. La bomba (the bomb). A lo que contribuye sin duda el uso de una nata fresca magnífica, de la cercana granja Priégola. Una nata excelente junto con un buen proceso de mantecado producen un helado que parece casi profesional. Aunque me esté mal el decirlo. Pues lo digo, a mí ya todo me da igual.
Receta Helado de miel
. Cocinado. Total
Helado de miel, sin azúcar
Autor: Miriam GarcíaTipo de receta: PostreRaciones: 8
Ingredientes
- 500 ml de nata líquida de buena calidad
- 250 ml de leche entera
- 160 ml de miel
- 3 yemas de huevos medianos
Instrucciones
- Se calienta la nata con la leche y la miel hasta que casi hierva.
- Se separan las yemas y se ponen en un cuenco (las claras las congeláis, que congelan estupendamente y las usáis para otro menester). Se baten y, cuando esté caliente la mezcla de los líquidos, se echa poco a poco sin parar de batir sobre las yemas para que no se cuajen.
- Todo el conjunto mezclado se vuelve a poner a fuego muy bajo o al baño María, removiendo sin parar hasta que espese (y sin dejar que hierva, pues se cortaría). Tened en cuenta que queda como unas natillas claritas, no demasiado espeso.
- Se deja enfriar por completo y se mete en el frigorífico toda una noche para que madure la mezcla.
- Al día siguiente se mete en una heladera o en el congelador. Si no tenéis heladera ya sabéis que tendréis que ir sacándolo cada media hora para batirlo, hasta que esté bien cremoso.
Notas
Con Thermomix: se ponen en el vaso las yemas, la miel y la leche, y se cocinan 10 minutos a 90 ºC y velocidad 4. Se añade la nata fría y se mezcla todo 6 segundos a velocidad 3. Después se deja enfriar y se procede igual que por el método tradicional.
Este helado encantará a todos los amantes de la miel y también a los que prefiráis usarla como endulzante más natural que el azúcar. Además, la miel, por su alto contenido en glucosa y fructosa, y bajo contenido de sacarosa, mejora las propiedades de cristalización del helado respecto a un helado elaborado con azúcar común. Y ya sabéis, si queréis que pruebe a hacer algún helado por vosotros además de este helado de miel, no tenéis más que decírmelo. Que yo me sacrifico.
Miriam
Natillas de Chocolate con Nata Priégola
Os hacemos llegar una receta publicada en el blog "Desayuno de Domingo" en la que se utiliza Nata Fresca de Priégola. Nos ha gustado mucho la receta porque además pone de manifiesto la importancia de utilizar nata fresca en los postres. Esperamos que os animéis a probar esta receta.
Mejor que un Dalky... (y con nata de verdad).
Se empieza haciendo yogures y pan y se acaba preparando versiones caseras de las cosas más variopintas...
Cuando una se va haciendo mayor va perdiendo el gusto por algunas de las cosas que te gustaban de pequeña, sobre todo si, como yo, te lees tooodos los ingredientes de cada cosa... acabas por cogerle asco a muchas de ellas. El festival de grasas hidrogenadas que suelen ser la mayor parte de bollos, galletas y postres que se venden actualmente le quitan a una las ganas de comprar nada: recuerdo un día en el que estaba fuera de casa haciendo recados y me dieron unas ganas locas de algo dulce, moría por algo chocolatoso, con azúcar... entré en un supermercado, y después de leer los ingredientes de varias cosas... salí... con un par de plátanos de Canarias; no fui capaz de comprarme nada más.
Afortunadamente no me pasa siempre, ni con todo: soy demasiado golosa para andar con tantos remilgos, y por supuesto que de vez en cuando cae alguna gochada; pero cuando tengo tiempo las preparo en casa, o intento comprar repostería más tradicional (como la que traigo muchas veces de Badajoz, o al menos que no lleven grasa de palma...).
Hoy me apetecía este postre, del que hay muchas versiones en internet: algunas usan huevo, también hay una para thermomix... la mía es de las más simplonas, básicamente unas natillas espesas de chocolate con nata batida por encima. Para 4 vasitos he usado:
Las natillas se pueden preparar también con los típicos sobrecitos para hacer flanes (que son, básicamente, maizena con aromatizantes), usando medio sobrecito. Se pone a calentar la leche con el azúcar y el cacao, reservando una parte para disolver la maizena que se añade cuando rompe a hervir. Se deja cocer apenas un minuto removiendo constantemente y se vierte en 4 vasitos. Cuando se enfría se mete en la nevera y se deja allí unas horas. Si no nos gusta que forme la capita de arriba podemos dejar enfriar todo en un único recipiente mayor y cubrir con film, o retirar esa capa y después repartir.Al ir a servir se monta bien la nata con azúcar al gusto, que quede muy firme (yo me quedé corta, me daba miedo volver a hacer mantequilla...); se pone por encima de cada vasito, con una manga pastelera o a cucharadas, y se sirve. Si nos ponemos creativos se pueden añadir avellanas picadas, pistachos o lo que se nos ocurra.
Una de las cosas buenas de hacerlo en casa es prepararlo con un buen cacao y una buena nata; mi hermana y yo hablamos mucho de esto, porque hemos notado que no sólo es prácticamente imposible encontrar en las tiendas nata que no sea UHT sino que además es igualmente difícil comprar una que no lleve espesantes y otros ingredientes.
Lo que ya nos parece el colmo es lo de la "nata vegetal", tan frecuente en la pastelería últimamente (puaj); entiendo que guste a los que no toman lácteos por cualquier motivo, pero la verdad es que a mí me parece una guarrería: aún recuerdo con horror un café irlandés preparado con esa plasta que no se disolvía ni a tiros, o peor aún, la invasión de roscones de relleno indestructible... Nah, que vivan las grasas animales.
Yo tengo suerte y no sólo puedo comprar cerca de casa nata pasteurizada, sino que además es de aquí cerca. (Ingredientes: nata... y ya):
Una rica manera de celebrar que mis últimos análisis de colesterol están ok... (por si alguien estaba preocupado, con tanta patatera y tantas otras cosas).
Y como está bien aclarar estas cosas, quería decir que pongo la foto sólo porque me gusta esta nata, que no me han pagado ni regalado nada... pero es que cuando algo está bueno hay que decirlo, ¿no? :)
Epa
Fuente: Blog Desayuno de Domingo - Epa
Receta Casera de Queso Fresco o Curado
Receta casera de Queso Fresco o Curado
La peculiaridad más destacable de este queso radica en ser de los pocos donde se utilizan ácidos como únicos coagulantes naturales, como el zumo de limón o el vinagre, y con muy poquito tiempo de preparación se obtiene un queso suave, de aspecto y textura muy similar al mató (queso fresco típico catalán, elaborado de manera muy similar) o requesón. En Asia, el Panir (o Paneer) es fuente esencial de proteínas, especialmente para aquellos que siguen una dieta vegetariana, siendo su aportación muy similar a la de las carnes.
Ingredientes
– 1 Lt. Leche Fresca Entera Priégola
– 1 Yogur natural
– Zumo de medio limón
– Una pizquita de sal normal
– 50g sal gorda
– Gasas
Con estas medidas nos quedará un queso fresco de no más de 200gr. Si se quiere hacer un queso de 400gr basta con doblar las cantidades.
Preparación
1. Templar la leche. Poned la leche en un cazo y calentadla. Recordad que ya está pasteurizada y por lo tanto no debe hervir, pues eliminaríamos totalmente gran parte de las bacterias naturales y el proceso para hacer queso sería casi imposible. Lo ideal sería rondando los 35-40ºC, pero si no tenéis termómetro, calentadla hasta que la notéis caliente al tacto, pero sin quemaros.
2. Añadir el yogur y la sal normal y remover. Remover la mezcla hasta que quede homogenea. Esto aportará fermentos a la leche además de acentuar su acidez, con lo que nos ayudará a su coagulación.
3. Añadir el zumo de limón. También remover y dejar que se cuagule. El suero se empezará a separar enseguida y se empezarán a formar grumos.
4. Dejar reposar. Mantener en reposo 1 hora aproximadamente sobre la vitrocerámica o el fuego apagado para aprovechar el calor residual, no del fuego, que puede ser de inducción, pero sí el que tiene el propio cazo, que sobre el mármol se enfriaría con demasiada rapidez. Con lo cual prolongamos un poco el efecto del calor. Cuanto más rato pase más cantidad de suero se observa flotar en el preparado, y más limpio. Es importante que no lo mováis.
5. Cortar la cuajada en cubitos con un cuchillo afilado (de unos 5cm x 5cm) para separar el suero de la cuajada. Colar y poner la pasta en un molde cilíndrico sin fondo con una gasa encima (si no tenemos molde cilíndrico se puede utilizar un colador corriente o un escurridor). Cerrar la gasa y colocado encima sobre una tabla de madera y apretar bien. Inclinar ligeramente la tabla con el molde encima para que escurra el suero y colocarle un peso (un bol con piedras o lo que sea pero que pese) para que se prense bien.
Opcional: Se puede guardar el suero, que sirve para hacer requesón, bollos, pan…
6. Guardar en la nevera 24h.
7. Finalización. A las 24h darle la vuelta al queso, quitarle el molde y cubrirlo con agua y con la sal gruesa durante 1h.
8. Opción Queso Fresco. Escurrir y si va a ser consumido como queso fresco, guardar en la nevera cubierto de agua. Cuando se vaya a comer se pueden presparar especias como cebollino, pimienta o nueces machacadas y un chorro de aceite de oliva para acompañar un buen pan de pueblo.
9. Opción Queso Curado. Si va a ser curado, untar de aceite. Dejar a temperatura ambiente (recomendado unos 15º y un poco de humedad) o en su defecto, en la nevera si es un ambiente seco y caluroso y darle la vuelta cada 24h hasta que esté suficientemente curado.
Consumption of local products. All are advantages
If you are 30 years or older and live in Spain, perhaps remember those times in which the milkman was going to the door of your House to sell you milk. Perhaps you remember the smell of fresh milk and the large amount of cream which had. You may also remember how your mother put it to boil before drinking it to kill the "bugs" that could contain milk.
Now the story has changed a lot. Although the previous paragraph may sound very romantic, there are now many more controls and systems that ensure milk to come to our House in perfect condition.
10 reasons to eat local foods
EAT LOCAL PRODUCE IS GOOD FOR THE LOCAL ECONOMY.
A euro spent on user-friendly products generated twice for the local economy. In today's complicated economic circumstances we are aware that this philosophy of consumption benefits us all.
THE PRODUCTS ARE FRESHEST.
A fresh product will always be more healthy to the body than a product requiring preservatives, freezing or stabilizers to extend their period of consumption.
In addition, the products transported over large distances may have been weeks frozen. Milk transport over long distances is only made with sterilized milk / UHT lasting several months without the need for cold storage.
LOCAL FOOD TASTES BETTER.
Pasteurized fresh milk has the same flavor milk which in the past was consumed in the villages, which are boiled before consumption and which mentioned at the beginning of this article.
UHT milk, have been subjected to a higher temperature, suffers more transformations (degraded some compounds and form that can change the odor, taste and color of milk). The most common of these is the caramelization of lactose.
In fruit and vegetables, a product harvested at their peak of ripeness has much more flavor than one prematurely collected by conditions of transport.
THEY ARE MORE NATURAL
Products made in their region or traditionally gathered near his village have fewer products to conserve them and additives.
In the case of fresh milk contains no obviously any preservative or additive. It is 100% fresh pasteurized milk.
CONSUME IN THIS WAY REDUCES EMISSION OF GASEOUS POLLUTANTS
Media that carry products from far away cause high emissions of CO2.
WE EAT SEASONAL
Eat seasonal products that are healthier to consume local products automatically. In addition, seasonal products are more economical.
YOU KNOW THE ORIGIN OF THE FOODS THAT YOU CONSUME
It is always more comforting to sit to eat knowing where they come from products you eat. Knowing the milkman, Baker, farmer, etc. and knowing how they work.
In the case of Priégola, we only elaborate products with milk from our own livestock in Villanueva del Pardillo. It is obtained from a single herd, milk a single location. Milk leaves the udder and goes directly to tank storage and pasteurization.
We do not carry milk coming from hundreds of kilometers for processing because in this process can cause many problems that decrease the level of fitness of milk for use. (Mixture of air, fragmentation of red blood cells, microbiological imbalances).
In the end, we get an exceptional taste of fresh and natural milk we produce with the same technique of pasteurization, for more than 50 years.
THE LOCAL FOOD IS VARIED
A farmer who produces industrially can dedicate to produce a wide range of products.
THEY PREVENT MONOPOLIES THAT ALTER THE PRICES OF ORIGIN
80% of the products are distributed in Spain by few companies that impose the final prices, produced and. Support small farmers used to fight against this.
BUYING FROM LOCAL PRODUCERS SUPPORT THE SUSTAINABLE DEVELOPMENT OF ITS LAND AND BUSINESS
With decent income, local producers will remain and will use its resources to generating wealth and employment for their community.
Crema de Lában Priégola con Menta y Pepino
Ingredientes (Para 6 personas):
- 1 litro de laban (yogur árabe para beber)
- 2 pepinos medianos y tiernos
- 2 diente de ajo pelados
- 15 hojas de menta fresca
- 1 cucharadita de sal gorda
- 1 dl. de aceite de oliva
- un poco de sal
Elaboración de Crema de Lában Priégola con menta y pepino
Majar en un mortero los ajos con la menta y la sal gruesa, hasta que quede como un pasta: Pelar los pepinos, cortar en daditos o en juliana y poner en un bol junto con el laban.
Añadir seguidamente el majado de ajos y menta y mezclar bien. Sin dejar de remover con varillas, incorporar poco a poco el aceite de oliva. Una vez bien incorporado poner a punto de sal. Dejar en la nevera hasta el momento de servir, ya que se toma bien frío.
Decorar si se desea cada bol en donde se sirva con una hojita de menta y un hilillo de aceite de oliva.
Esta receta se puede comer directamente con cuchara o bien como salsa para tomar con pan de pita. Esta segunda opción es muy parecida a la salsa griega "tzatziki".
Priegola, famous Madrid milk milk
Blog of gastronomy "Market Calabajio" make a report about Priégola products.
The truth is that in Madrid we cannot complain of the large amount of livestock farms in the periphery of the capital... for the little green is right?, Yes, and it is a marvel. Arpon milk is one of the first milk of our region, one of the pioneers of the distribution of fresh milk door to door throughout our community. The company has survived the urban Empire (although there is a need to transfer), and of course the countless crisis in the sector, which have been many and hard. Also today Arpon is one of the best-known Madrid fresh milks outside our territory, it has already entered into many families and is used by many restaurateurs, among other things because it is pretty accessible and quality per is... Read more
Leche Priégola, la famosa leche de Madrid
El Blog de gastronomía "Mercado Calabajío" realizar un reportaje sobre los productos de Priégola.
La verdad es que en Madrid no nos podemos quejar de la gran cantidad de explotaciones ganaderas que tenemos en la periferia de la capital... para lo poco verde que queda ¿verdad?, pues sí, y es una auténtica maravilla. Hablar de la leche Priégola es hablar de una de las primeras leches de nuestra región, una de las pioneras del reparto de leche fresca a domicilio en toda nuestra comunidad. La empresa ha sobrevivido al imperio urbanísitico (aunque hubiera un traslado por necesidad), y por supuesto a las innumerables crisis del sector, que han sido muchas y duras. Además hoy por hoy Priégola es una de las leches frescas madrileñas más conocidas fuera de nuestro territorio, ya ha entrado dentro de muchas familias y es utilizada por muchos restauradores, entre otras cosas porque es bastante accesible y por su calidad per se.... Leer Más
Receta Mousse de Chocolate con Nata Priégola
Ingredientes:
300 gr. tableta de chocolate negro con 70% Cacao
75 gr. mantequilla
200 gr. azúcar glas
250 ml. de Nata Fresca Priégola
4 claras de huevo
Un chorrito de brandy
Preparación:
Montar la nata bien fría y añadir el azúcar glas (se puede moler el azucar en una picadora).
Derretir la tableta de chocolate unos minutos al microondas o en baño maria teniendo en cuenta que no se pegue.
En caliente el chocolate, mezclar con la mantequilla. Una vez este el chocolate tibio añadir un poco de brandy. Mezclar con la mezcla de nata montada y azúcar.
Montar aparte las claras a punto de nieve.
Incorporar las claras a punto de nieve y mezclar de forma envolvente con una espatula rasera de cocina sin agitar, despacio, controlando que no se bajen las claras. Una vez mezclado bien el chocolate y el resto de ingredientes introducir en el frigorífico unas horas. La mezcla debe de quedar tipo mousse firme pero esponjosa en su interior (debido al aire de las claras de huevo montadas).
Opcional: Se pueden tostar en una sarten avellanas enteras con azucar moreno y antes de servir la mousse pondremos unas cuantas por encima. Se puede presentar en un bol o en copas individuales.